12 enero 2007

Que bien se está cuando se está bien.

Vaya... Dia 12 de Enero y tengo el Blog abandonado en el olvido. Ahora, cuando más tiempo se supone que tengo para hacer estas cosas, resulta que es donde menos lo invierto. Y es verdad, que cuanto menos haces, menos quieres hacer. Si, ya va a hacer un mes de mi entrada en el paro, y la verdad es que se hace extraño, un poco largo ya, y más raro aún sentir que uno mismo necesita cierta responsabilidad. Esto no es, ni mucho menos! una oda al trabajo, faltaría más. Pero si es cierto que uno necesita desarrollarse en su profesión para sentirse realmente persona, eso en esta sociedad que nos ha tocado vivir, es así, por mucho que queramos autoengañarnos. Y lo estoy notando, sí, porque uno tiende un poco a menospreciarse cuando está en estas situaciones límites que estoy viviendo últimamente en el aspecto laboral. Fijáos, yo, que era de los que no enfermaba nunca, o con poca historia de por medio, en estos últimos meses he caído, de gripazo y potente (sudor, mocos, fiebre, cama, manta y sopitas...) ya dos veces. ¿Pensáis que el estado circunstancial afecta al estado físico? Veréis, ¿recordáis mi "mal viaje"? Una de las enseñanzas de aquel viaje fue precisamente en este aspecto: las enfermedades, en un 90% de los casos nos las autocreamos con la mente. Bueno, esta fue mi visión, pero realmente hay muchas vertientes que opinan lo mismo o más radical, incluso hay creencias que TODAS las enfermedades son psicosomáticas, aunque en ese caso ya no me atrevo a poner la mano en el fuego por ello. Pero realmente uno mismo puede ver que cuando sus circunstancias vitales no son muy positivas, o hay aspectos de la vida que nos pueden provocar ciertos estímulos físicos que en corto o largo plazo se transforman en enfermedad. Pues bien, el hecho es que desde que dejé a las brujas, o en este caso me hicieron dejarlas (gracias!) y estoy en el paro, llevo con un gripazo enooooorme desde el dia 4/5 de Enero. Fíjate, y estamos a 12! Y hoy empiezo a ser persona de nuevo, aunque el oido izquierdo lo tengo inutilizado (puf!) y mi nariz es una fuente de blandiblub. Pero bueno, ya se puede decir que estoy vivo otra vez, y me alegro, sí, yo más que tu seguro, porque qué bien se está cuando se esta bien...

No hay comentarios: